AVN.- La consigna Educación pública y popular movió este sábado a estudiantes y profesores hasta la plaza Diego Ibarra, en el centro de Caracas. El ambiente de alegría los acompañó en todo el recorrido.
Y es que esa consigna ha pasado a ser una política del Estado venezolano en los últimos años, que ha generado resultados positivos: se logró la eliminación de la denominada población flotante y los bachilleres sin cupo, y hoy Venezuela es el segundo país en América Latina y el quinto en el mundo con una importante matrícula universitaria.
Irma Rodríguez, maestra en El Vigía (Mérida), dijo que el respaldo manifestado hoy de su parte tiene para ella y su familia un significado muy importante. Su hijo es estudiante de la Universidad Nacional Experimental de la Fuerza Armada (Unefa).
El hijo de Irma goza de este derecho, que a pesar de ser un derecho contemplado en la Constitución le fue negado por algunos años. «Presentó en varias universidades públicas y nada. Pero esa realidad cambió: Chávez abrió las puertas de las universidades al pueblo y mi hijo pudo iniciar su formación».
En Venezuela existe actualmente 2,5 millones de jóvenes incorporados en la educación universitaria, en contraste con la realidad de hace 14 años, cuando la matrícula apenas registraba 700.000 universitarios en todo el país.
«Por eso vine de El Vigía (Mérida) para apoyar esta marcha, queremos llegar al punto en que todas las universidades sean del y para el pueblo, sin excepción», recalcó.
Diferentes consignas, coloridas pancartas y muestras de música y bailes tradicionales se veían a lo largo de esta marcha de jóvenes estudiantes.
«Mientras el neoliberalismo privatiza la educación, en Venezuela nos formamos en Revolución», decía una de las pancartas que desfilaban por la avenida México, y que era sostenida por un grupo de estudiantes de la Universidad Central de Venezuela (UCV).
Carlos Bello, joven estudiante de Administración de la UCV, formaba parte de ese grupo. La razón de su asistencia a esta movilización estuvo bien clara: «Defender el derecho del pueblo a formarse».
Una de las prioridades del Gobierno Bolivariano ha sido la educación en sus distintos niveles. Es por ello que actualmente se invierte 7% del Producto Interno Bruto en el área.
La meta de lograr un esquema educativo incluyente y gratuito fue prioridad para el comandante supremo de la Revolución, Hugo Chávez Frías, quien impulsó toda una política educativa, creando las misiones: Robinson, Ribas y Sucre.
Estas y otras razones hacen que Carlos Bello rechace que la cúpula de su casa de estudio se preste para planes para desestabilizar el país. «Nos violan al derecho de estudiar, queremos estudiar, no queremos más paralización de nuestras actividades. Apostamos a la educación de calidad incluyente».
«Nuestro contraataque será estudiar, llenar las aulas de clase. No aplaudiremos sus planes», recalcó este estudiante.