Nacionales
El Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, recordó este lunes los 50 años del asesinato del Comandante Ernesto “Ché” Guevara.
En su cuenta Facebook escribió: “Hace 50 años, el Comandante Ernesto “Ché” Guevara vio a los ojos a la muerte y con la gallardía que lo caracterizaba, se le plantó firme y así trascendió a la eternidad como un ideal, como un ejemplo de lucha, de la moral del Revolucionario”.
Asimismo, relató que un día antes el Ché Guevara había sido herido en combate cuando un balazo inutilizó su fusil y recibió un disparo en la pierna: “Esto hizo que lo capturaran los militares bolivianos y lo trasladaron hasta La Higuera, donde estuvo encarcelado en una escuela. Horas después, agentes de la CIA en Bolivia llegaron al sitio y ordenaron darle muerte al Comandante Guerrillero”.
“La presencia del Ché, incluso en su hora menguada, hizo que a quienes les tocó la vil tarea de asesinarlo, sintieran temor de cometer aquel ajusticiamiento. Uno de sus asesinos confesaría luego que el propio Ché le dijo “¡Póngase Sereno y apunte bien! ¡Va a matar a un hombre!”, para luego ser fusilado”, agregó.
El Jefe de Estado venezolano señaló que quienes ordenaron su muerte, nunca pensaron que en lugar de desaparecer al héroe de la Revolución Cubana y de los pueblos latinoamericanos, “lo que hicieron fue inmortalizarlo y convertirlo en ejemplo para la lucha antiimperialista”.
Ernesto “Che” Guevara nacido el 14 de junio de 1928 en Rosario, Argentina, eligió un camino distinto al que muchos podrían imaginar para él, dada su privilegiada posición económica.
En sus numerosos viajes por América Latina recogió los deseos de cambio y de justicia de los pueblos oprimidos: “Ese vagar sin rumbo por nuestra Mayúscula América me ha cambiado más de lo que creí”, relató, en una de las crónicas posteriores a su segundo viaje.
El Che veía la injusticia. Era un marxista autodidacta que luchó por el socialismo para reemplazar al capitalismo.
Fue capturado y ejecutado de manera clandestina en Bolivia, por orden de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), mientras impulsaba la instalación de focos guerrilleros en el país suramericano el 9 de octubre de 1967.
Su muerte no fue suficiente para acabar con el respeto y admiración por el Líder Revolucionario y su papel en la historia.
Aún después de su asesinato, el Che y sus ideas siguen vivos en los movimientos que reclaman un cambio en las estructuras de poder.
VTV