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El presidente de la República, Nicolás Maduro, recordó este miércoles al diputado socialista Robert Serra, asesinado en octubre de 2013, y resaltó que el líder juvenil «nos dejó un ejemplo de lo que es la fe, la confianza en un proyecto político, el proyecto de la Revolución Bolivariana», manifestó el Presidente, durante el mensaje anual que ofrece a la nación desde el Palacio Federal Legislativo, en Caracas.
Destacó que Robert fue «en vida fue un ferviente defensor de sus ideas, un apasionado defensor de la Revolución, un hombre que supo gestar su inteligencia y su verbo en su corta vida».
El jefe de Estado apuntó que Serra personificó esa juventud «que fue convocada y motivada a participar protagónicamente en la política por nuestro comandante supremo Hugo Chávez, que se le abrieron las puertas como nunca jamás se le abrieron las puerta a la juventud para que participara en la política, en las decisiones, en la luchas. Una generación que salió a las calles, al batallar de las ideas, y que comenzó a firmar su propio espacio político».
Recordó que el crimen contra Robert Serra, del que fue también víctima la compañera del parlamentario María Herrera, fue perpetrado por una banda paramilitar colombiana, dirigida por Leiva Padilla, conocido como «El Colombia», que planificó el asesinato. En él participaron ocho personas: seis que ejecutaron el crimen y dos que permanecieron en dos carros fuera de la vivienda.
Señaló que con su muerte, Serra «también dejó una marca, una señal, para que todos saquemos lecciones de cuál es el camino de la lucha en Venezuela: el camino de la paz o el camino de la violencia, el camino de la convivencia y el respeto sobre la base de la luchad de ideas, o el camino del terrorismo, del sicariato».
El mandatario nacional precisó que recordar la memoria de Serra trae consigo las batallas que asumió el pueblo venezolano en el 2014, «donde se puso a prueba toda la voluntad de paz de un país, donde se arremetió de distinta forma, pretendiendo llevar a los límites la convivencia interna de la lucha política, y por la vía de la violencia imponer esquemas de intervención en los asuntos internos de nuestra patria».
El asesinato del diputado revolucionario Robert Serra y de su compañera María Herrera fue ejecutado la noche del1° de octubre pasado, dentro de la casa del parlamentario, ubicada en La Pastora, en el oeste de Caracas. Por el crimen están detenidas tres personas, entre ellas el jefe de escoltas de Serra, Edwin Torres Camacho, quien confesó quiénes y cómo se planificó este asesinato.
El asesinato fue planificado durante tres meses, tiempo en el que Padilla realizó una persecución detallada para registrar la cotidianidad de Serra, para lo cual el jefe de escoltas de Serra, conocido como «El Poli», fue comprado para ayudar a cometer el crimen.
AVN