Juventud / Nacionales
Prensa AVN.- A través de un mensaje de paz y fraternidad, el ministro para la Comunicación y la Información, Ernesto Villegas, reiteró las intenciones del gobierno venezolano para lograr la reconciliación con aquellas personas víctimas de las campañas de odio, promovidas por dirigentes de la derecha venezolana y los medios de comunicación que responden a sus intereses.
«A aquellas personas que son víctimas de esas campañas de satanización y de desprecio sistemático, les decimos que aquí estamos, que somos hermanos y que les cambiamos su odio por amor, pues este pueblo no odia», expresó Villegas durante un encuentro del Consejo Federal de Gobierno que se realizó este sábado en Zulia, el cual fue presidido por el vicepresidente ejecutivo, Jorge Arreaza.
«Ustedes pueden dormir tranquilos en sus casas -continuó Villegas-, porque después de cada triunfo de Chávez y ahora después del triunfo de Maduro, a nadie se le va a ocurrir tocar su puerta para entrar o para importunarle, para decir que vamos por ustedes, que tenemos venganza, que ‘ahora dónde se van a esconder’. Eso no lo dicen los chavistas ni los revolucionarios porque ustedes son nuestros hermanos, conviven con nosotros en nuestras comunidades».
Por otra parte, hizo referencia a las personas que fallecieron durante la ola de violencia desatada a partir del 15 de abril, luego de las declaraciones de ex candidato presidencial, Henrique Capriles Radonski, quien se negó a aceptar la derrota en los últimos comicios presidenciales.
Recordó que este sábado se rindió un homenaje a los zulianos fallecidos que salieron a defender los Centros Médicos de Diagnóstico Integral (CDI), que es una de las obras representativas de la revolución bolivariana, fundada por el comandante Hugo Chávez.
Asimismo, indicó que ante estos discursos y acciones de violencia, la respuesta del Estado venezolana, compuesto por sus instituciones legítimamente constituidas y por los ciudadanos venezolanos, ha sido y será la misma de Hugo Chávez: unirse al pueblo y construir poder popular.
«Ese odio desatado, en el fondo, nos llena de orgullo porque es hijo del que le tuvieron a Chávez, y que no logró mellar nunca la altura del comandante. Por el contrario, al margen de ese odio pudo construir poder popular, no hizo caso a esas continuas difamaciones, expresiones mezquinas que lo caricaturizaban como ser humano y como líder político, y él, lejos de engancharse con ese odio desbocado de la derecha, se zambulló en el pueblo, este pueblo combativo resuelto a ser libre».