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Foto: @ViceVenezuela
Con el nacimiento de la Revolución Bolivariana, en 1999, Venezuela se convirtió en ejemplo de dignidad para los pueblos del mundo y, a su vez, el modelo socialista de Hugo Chávez, signado por la reivindicación de las luchas sociales y la justicia, comenzó a ser el camino para la emancipación, realidad que la ha convertido estos 17 años en el blanco de los ataques imperiales, indicó el vicepresidente Ejecutivo, Aristóbulo Istúriz.
Durante el Congreso de la Patria, capítulo Salud, celebrado en Caracas, Istúriz indicó que la Revolución Bolivariana y el socialismo bolivariano comenzó a surgir precisamente en un momento en el que los que los pueblos pensaban que no había otro destino distinto al mantenerse sumiso frente al capital.
Se pensó que no habían esperanza hasta que llegó Hugo Chávez, recalcó el Vicepresidente Ejecutivo, quien señaló que el líder socialista logró mostrar al mundo que con soberanía, independencia y autodeterminación los pueblos podían ser realmente reivindicados.
“Chávez comienza contra la corriente a nadar, dando frutos, dando respuesta, no perdiendo el tiempo”, dijo Istúriz y señaló que en poco tiempo los indicadores sociales en Venezuela demostraron los resultados en ese sentido: erradicación del analfabetismo, aumento de la cobertura del servicio de agua potable, disminución de la pobreza y la miseria, aumento de la matrícula escolar y universitaria, la expansión de los servicios de asistencia médica gratuita, aumento del número de pensionado, descenso de los desempleos.
Fue de esa manera “convirtiéndose en una referencia la Revolución y su líder, y comenzó el despertar en los pueblos de América Latina”, y ese ejemplo comenzó a expandirse por el mundo, reiteró Istúriz.
Además, Chávez impulso la unión e integración de los pueblos, lazos que se fueron extendiendo al punto de traspasar fronteras y continentes. Fue Chávez “el que derrumbó los muros que nos separaban”, rememoró el vicepresidente Ejecutivo, quien señaló que ello permitió “romper los lazos de dependencia impuestos por el imperialismo”.
Ante esa realidad, las potencias y fuerzas imperiales alinearon sus planes de embestida contra Venezuela, que arreciaron tras la partida física del Comandante Chávez, en 2013. Eso hizo “que se convirtiera en el blanco fundamental, en el enemigo número uno”, sostuvo.
AVN