Internacionales / Regionales
La hipocresía y la bajeza moral de los voceros de la derecha parecen no tener límite. Ante las noticias conocidas acerca de la salud del presidente Chávez, algunos se están haciendo equivocadas ilusiones respecto del abandono del poder, o lo que es peor, de la desaparición definitiva del líder de la revolución bolivariana.
Incluso, los medios de información burgueses ya barajan nombres para sustituirlo y hacen apuestas en torno a las divisiones internas del PSUV y a la debacle que según ellos sobrevendría en el proceso venezolano, con lo cual los otrora poderosos dueños del capital y constructores de la pobreza de millones de venezolanos y venezolanas accederían nuevamente a sus andanzas y al sojuzgamiento arrogante que históricamente han ejercido en contra de los intereses de las mayorías.
Son esos mismos voceros golpistas y apátridas, que no esconden su alborozo por la difícil circunstancia que atraviesa el presidente Chávez, los que mueven los hilos del poder de clase para que sus émulos colombianos les abran el camino expedito para conquistar la joya de la corona: la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá, objeto de la más burda acción política y financiera para justificar su venta y simultáneo traspaso a la alianza de capitalistas españoles, colombianos y venezolanos que la quieren para llenar aún más sus bolsillos y arrebatar a los bogotanos y al país una de sus más prósperas y prometedoras empresas públicas.
Que no se froten tempranamente las manos. El proceso revolucionario bolivariano está marchando a todo vapor y las fuerzas populares, encabezadas por sus más probados dirigentes y sus partidos de clase, están preparadas para defender sus conquistas y no permitir el retroceso histórico.
Desde aquí, toda nuestra solidaridad con el comandante Hugo Chávez y nuestros mejores deseos para que su recuperación sea pronta y efectiva. También nuestra voz de aliento a las masas populares bolivarianas para que hoy más que nunca redoblen la vigilancia revolucionaria y defiendan los logros que han alcanzado, invirtiendo la pirámide de forma que los recursos del estado sean para la mayoría y no para los mismos pocos de siempre.
Salud al comandante Chávez y toda nuestra adhesión al fervoroso y valiente pueblo bolivariano en Venezuela.
5 de Julio de 2011